Por Anaisa Montoya, Logopeda en Agacia Centro Terapéutico. 

El abuso de las pantallas en menores de tres años lleva siendo desde hace varios años un tema de debate en nuestra sociedad.

Son numerosos pediatras de nuestro país los que se han pronunciado ante la gran variedad de lactantes que han tenido que ser derivados a Centros de Atención Temprana diagnosticados de retraso en la adquisición del lenguaje como consecuencia de una exposición excesiva a las pantallas y que deben ser incluidos en programas de refuerzo en atención temprana psicológica y logopédica.

Como reflejan los especialistas, el abuso de pantallas como televisión, Tablet y móviles alteran el desarrollo natural del cerebro de los menores, enfrentándose estos a una gran cantidad de estímulos para los que aún no están preparados para procesar, pudiendo causar también problemas de irritabilidad y ansiedad o problemas de atención cuando estos llegan a la etapa escolar.

Un estudio realizado en 2017 por la Pediatric Academic Societies Meeting, constató que dos de cada diez niños de entre dos y seis años pasan una media de 28 minutos diarios usando las pantallas. Descubrieron que el incremento de estos intervalos de tiempo a lo largo de día, tiene un 49% más de riesgo de causar un retraso del lenguaje expresivo en los niños.

Es importante y necesario hacer conscientes a las familias que un uso incontrolado y excesivo de las nuevas tecnologías puede causar daños en la salud de sus hijos. Cada vez estamos más acostumbrados a ver los carritos de bebés con soportes para colocar la Tablet o móvil como si se tratara de un complemento más de éste. Cuando preguntamos a las familias cuanto tiempo pasan sus hijos ante una pantalla suelen decir una hora como máximo, pero realmente no son conscientes de del tiempo que pasan ante un móvil, Tablet o televisión (durante las comidas, la hora de dormir, paseos en carrito mirando una pantalla, durante las tareas de casa, etc.), superando la media de los pacientes atendidos en consulta una media de dos horas cuando lo recomendado para lactantes es cero.

Cuando hablamos de abuso de las pantallas en niños, solemos enfocarlo a la etapa de la adolescencia, sin darnos cuenta que los adultos cada vez estamos más obsesionados con las redes y las tecnologías, causando de forma inconsciente una adicción a nuestros pequeños. Si observamos los parques infantiles, las madres o padres en diversas ocasiones pierden la pista de sus hijos por estar mirando una pantalla. Es por ello, que todos debemos hacer un uso controlado y responsable de las nuevas tecnologías para que no afecte a nuestra vida diaria y por supuesto a la de los más pequeños.

A pesar de que actualmente existen numerosas aplicaciones y juegos interactivos a los que podemos acceder para entretener o educar de forma lúdica a los más pequeños, la principal manera de desarrollar el lenguaje de los niños es a través de la interacción con el adulto o sus iguales. Interactuar con los pequeños a la hora del baño, de las comidas o a la hora de dormir les dará información verbal y no verbal que dará lugar a un correcto desarrollo del lenguaje. El cerebro humano esta creado para aprender a través de la imitación e interacción con el resto de la sociedad, por lo que hablarles a nuestros pequeños, enseñarles nuevos gestos, nuevos tonos de voz y comunicarse con su cuerpo hará que su cerebro, órganos auditivos y visuales se desarrollen de forma natural y correcta.

Si quieres más información contacta con nuestros especialistas a través de nuestro contacto.

 

 

*Imagen destacada autoria de @teksomolika (https://www.freepik.es/autor/teksomolika

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

* Al solicitar información, declaro que conozco y acepto la política de privacidad de este sitio.

Los datos de tus comentarios están seguros. Responsable: Iraida Yasmina Puerta Porcel. Finalidad: moderar los comentarios. Legitimación: tu consentimiento. Destinatarios: no cederé tus datos a terceros, salvo obligación legal. Derechos: tendrás derecho, entre otros, a acceder, rectificar, limitar y suprimir tus datos.