Por Emilio Galiano, fisioterapeuta en Agacia Centro Terapéutico
Cuando hablamos de prevención del dolor de espalda, muchos piensan en la altura o el material de la silla, otros tantos imaginan que la rectitud y perfección de la espalda determinará cómo acabemos la tarde. Muy pocos saben cuáles son las claves que realmente determinan si te dolerá la espalda o no. A continuación, os ofrezco 3 claves importantísimas (sobretodo la 3) para no tener dolor de espalda.
Estas claves se aplican a opositores y estudiantes tanto como a personas que trabajen en oficina como arquitectos, ingenieros o abogados.
CLAVE 1. IMPORTA MUY POCO TU SILLA
O tu mesa.
No importa siempre que sea algo cómodo. Debe ofrecer un respaldo firme sobre el que poder reposar la espalda. El material cuanta más amortiguación ofrezca mejor, será de interés el material esponjoso y viscoelástico, pero, como ya veremos, no es “condición sine qua non” para evitar el dolor de espalda.
No necesitamos gastar una gran suma de dinero para evitar el dolor de espalda.
CLAVE 2. PERMITE UNA POSTURA SUAVE
No la fuerces.
No existe nada peor para tus cervicales o tus lumbares que tensarlas todo el tiempo en busca de mantener “las curvas fisiológicas”.
La postura es algo que fluctúa a medida que cambian las necesidades de esa espalda, siempre que te encuentres en una posición cómoda será una postura adecuada.
Pasarán 5-10 minutos y nosotros estaremos una posición algo distinta, es natural y sano que esto ocurra, pero si nos venimos demasiado abajo y nos cuesta estar en una posición cómoda, es hora de llegar a la clave 3.
CLAVE 3. HAZ DESCANSOS ACTIVOS
Descansa cada 30 minutos o cada hora. Al menos 5 minutos de estiramientos y distraer la vista.
Si estamos más de 1 hora sentados, fijando la vista, puede ser una silla acolchada de lujo, tu espalda te dolerá.
La única forma de evitar el dolor haciendo algo tan ‘antinatural’ para tu espalda como es pasar 5-8 horas quieto, es moverte en esas horas, de manera sistemática y pautada: estirar aquello que más nos moleste y movilizar la espalda de manera activa.
Pon alarmas silenciosas para recordarlo, practica estiramientos en tu día a día y así sabrás cuáles son los que más necesitas cuando estás trabajando.
CLAVE EXTRA. HAZ EJERCICIO.
Y no digo deporte, digo ejercicio. Salir a andar o correr es necesario para el ser humano. No existe persona sedentaria sana, puede estar temporalmente bien pero nuestro organismo necesita moverse.
Si ya has desarrollado alguna patología y no puedes hacer ejercicio o con estas claves no se evita el dolor de espalda es el momento de acudir a un profesional cualificado para el sistema musculoesquelético, el fisioterapeuta.
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